Como buen brasileño, seguro que ha oído hablar de al menos una leyenda urbana, ya que forman parte de la cultura de varias partes del país. Ésta es la leyenda de Tereza Bicuda, una famosa historia originaria del campo de Goiás, en la ciudad de Jaraguá.

La mujer, que se llamaba Tereza, tenía los labios grandes y por eso le dieron el adjetivo de "Bicuda". Era extremadamente violenta con su madre, una anciana, a la que pegaba varias veces al día y encadenaba. Además, obligaba a la mujer a pedir dinero por las calles y, por último, hizo lo impensable: puso una brida de caballo en la boca de su madre para pasearla por la ciudad.Las dosLos vecinos se quejaban constantemente de Tereza por su mal comportamiento.

Embrujada

Después de esto, Tereza Bicuda se volvió aún más atormentada de lo que ya estaba. Iba por el pueblo gritando y bebiendo mucho. Jaraguá era un lugar extremadamente religioso y la mujer era una de las únicas del lugar que nunca iba a la iglesia. Esto era considerado muy grave en la época y mucha gente pensaba que ella...Un día, Tereza Bicuda murió por causas desconocidas y fue enterrada en el cementerio del pueblo.

Sin embargo, los vecinos de la Rua das Flores empezaron a denunciar que todos los días, a medianoche, el fantasma de Tereza se paseaba por el lugar gritando. Era posible oírla pegar a su madre, como hacía cuando aún vivía. Así, los jaraguenses decidieron enterrarla cerca de la iglesia del Rosario, un lugar construido por esclavos y que recibía a la gente más pobre. No sirvió de nada, losfantasma siguió atormentando a todos.

Maldición

Iglesia de Rosário, donde fue enterrada Tereza. Foto: Lucas Araújo.

En un último intento, la población decidió depositar su cuerpo en la sierra de Jaraguá. Tereza Bicuda dejó de venir a la ciudad, sin embargo, justo encima de donde fue enterrada, ¡nació un anacardo embrujado! Cuenta la leyenda que cualquiera que se atreva a coger el fruto del árbol es maldecido y atacado por un enjambre de abejas que existe en el lugar. Al fin y al cabo, el fantasma de Bicuda también recorre la sierra en las nochesSegún cuentan, los gruesos labios de Tereza sonreirán y te hará lo mismo que a su madre: cabalgará como un caballo y te obligará a cumplir sus órdenes.

Hoy en día, si se va a la ciudad, se pueden ver todos los puntos mencionados en la leyenda, desde la Rua das Flores hasta la iglesia y la montaña. No hay jaraguense que no sepa y afirme que la leyenda es real. Sin embargo, es difícil, de hecho, demostrar esta veracidad.